En el oficialismo libertario no quieren profundizar la debilidad que ya sufren en el Congreso y ahora elucubran cómo procesar el escándalo que desató la confesión del presidente provisional del Senador con sus militantes bancados con dineros públicos.
Los hermanos Milei junto al senador Bartolomé Abdala.
“Tengo muchos en la provincia… Muchos de ellos colaboran conmigo dándome ideas sobre lo que sucede en el territorio. Cuando llego a San Luis tengo que interiorizarme, gente que te ayuda con las reuniones”, confesó el senador libertario Bartolomé Abdala al ser consultado sobre la cantidad de asesores nombrados por cada miembro de la cámara alta.
La confesión televisada en vivo y en directo del presidente provisional del Senado desató un escándalo, tanto afuera como adentro de La Libertad Avanza (LLA), partido gubernamental tan empeñado en “combatir a la casta” que hace política con dinero de los contribuyentes. Exactamente como en el caso de Abdala.
Ante semejante revelación, que incluiría una quincena de “asesores militantes” que no prestan servicios en el Senado, muchos libertarios intentaron elevar la voz para pedir un escarmiento, quizá una expulsión del partido que a priori pretendía permanecer impoluto ante los “vicios de la política”.
Sin embargo, desde el Poder Ejecutivo se hizo primar el pragmatismo en un oficialismo de por sí débil en el Congreso y que, encima, sufre conflictos internos casi cotidianos en el ámbito parlamentario. Conflictos, por cierto, que ya le provocaron varias bajas.
En los tiempos difíciles que se vienen, ante un Congreso que parece haberse plantado frente al autoritarismo y la discrecionalidad encarnada en Javier Milei, “no podemos seguir echando gente”, dijo una fuente muy cercana al núcleo duro de LLA, el que toma las decisiones anarcocapitalistas.
“No podemos seguir echando gente… El de Abdala fue un error y se va a ordenar, pero la idea es que siga en el espacio”, expresó el vocero oficioso. Lo que no se aclaró es si el “error” fue pagar su militancia con dineros del Senado o haberlo hecho público…
Por lo pronto, le están pidiendo que “reorganice su planta de asesores y se deshaga de algunos”; o que los ponga a trabajar en la cámara alta, lo que parece bastante difícil teniendo en cuenta que todos se domicilian y “trabajan” en San Luis para la candidatura a gobernador de Abdala.
Un senador nacional mileísta que, por cierto, siempre se supo acomodar: fue funcionario provincial de los Rodríguez Saá, luego formó parte del PRO y finalmente pegó el salto a La Libertad Avanza para ponerse directamente en la línea de la sucesión presidencial.